Un buen consejo
¿Por qué hay que cambiar el líquido de frenos y cada cuánto se cambia?
El líquido de frenos pierde sus propiedades con el paso del tiempo. A medida que envejece absorbe la humedad del aire, acumulando agua. Cuando este líquido pasa por las zonas de máxima temperatura del circuito de frenos (pinzas y bombines) el agua se convierte en vapor, creando burbujas de aire que producen un tacto esponjoso en el pedal de frenos y una disminución considerable de la efectividad del sistema.
Los periodos de sustitución del líquido de frenos han de ser los que establezca el fabricante, pero, como norma general y a modo de referencia el líquido de frenos suele cambiarse aproximadamente cada 40.000 km o cada 2 años.